Soledad

En ti nazco y en ti muero cada día,
y aún así, nunca te espero. Tu presencia no entendida me hace daño.
Siempre te lo digo.
Apareces cada noche a desvelar mi sueño.
Crees que como ya no tengo la mano cálida, la piel suave, el calor que me envuelva,
necesito de tu compañía.
Pero no te espero y me asustas. No te busco y apareces.
Siempre te lo digo.
Infinita y fiel amiga.
Tu aliento es frio, muy frio.
Me oprime el pecho, me congela el cuerpo.
Sé que no es tu intención, que nunca lo fue pero te temo porque no te veo.
Porque no te comprendo.
No sé mirarte de frente.
Mi arrogancia no puede más que despreciarte.

Pero un día, de repende, te veo Soledad,…
eres de belleza exquisita, diamantina, inquebrantable.
Sólo he de saber encajarte. Tu forma completa el hueco de mi puzle dolorido.
Hablemos Soledad,
cuéntame tus miedos, que yo te narraré los míos.
Seamos una, querida y estimable amiga, porque en mi te harás fuerte, serás independiente.
Y podremos amar sin miedo a la muerte.

Yocuidarétussueños!

Nara

Imagino, siento, pienso, intuyo.
¿Pero cómo convierto todo eso en entendimiento?,
¿qué lenguaje visual y claro para todo este manifiesto?
Las palabras quedan estrechas para expresar mi desierto, mi luz, mi angustia por dar sentido a la mochila que cargo dentro.
Así que, aquí y ahora decido crear un lenguaje nuevo,
una enciclopedia de viento.
Y con un soplo podré llegar a los confines del universo.
Soy capacidad de darle forma y realizarlo,
no es solo deseo,
puesto que soy Nara y Nara, es todo eso.
Cuando te acaricie hará que nazca y veas todo lo que tienes inmerso;
hablaremos el mismo idioma, cuando te roce mi aliento.
Miráme a los ojos y sólo con eso, sabrás que siento y pienso.
No estamos solos,
somos Nara, nuestra Diosa,
la de todo el universo.

Inyéctate sólo Amor

Quieres dejar de exigirte,
quieres dejar de temer,
quieres dejar de desear que amen hasta el último poro de tu ser.

Quieres dejar de sentir que tus venas se secan,
quieres dejar de ver lo que no es,
quieres dejar de creer que tu alma en pena erra.

Quieres dejar de dudar,
de arrancarte la piel.
De taparte los ojos y oidos cuando te quieres esconder.

Como yonqui enganchado al desaliento.
Sólo debes dejarte de inyectar,
nada más.
Tú eliges el camino a caminar,
tú, y nadie más.

Vamos Sal!
Hoy es diferente,
hoy eres más fuerte,
aún y en la debilidad.
Porque sientes lo que quieres,
y se traduce sólo en amar.

No te queda otra,
hoy te sabrás Amar de verdad,
y sólo ese,
ninguno más,
es el único camino para la Gran Libertad.

Ama&selibre!

Eres un colorín…

Hoy te levantas,
y piensas que es un día cualquiera, de nuevo.
Pero no es así.
Siempre te levantas diferente.
Las legañas son nuevas
y así lo es, el aire que respiras cada vez;
el sueño no fue el mismo de ayer, ni que anteayer.
Por tanto, tu ya no eres, quien creías ser.

Uppsss,
un cosquilleo recorre toda tu piel.
Esa sensación de darse cuenta que hoy
parace que vuelves a nacer.

Yoga, Cristanismo, Bailar, Cantar, o Zen,
no hay nombre ni palabra que lo pueda definir.
Solo puedes sentirlo y escribir,
en el diario que hoy abres nuevo para ti:
voy a dar lo mejor de mi.

Los renglones están en todos retorcidos,
en tí y en mí.
No hay nada que me haga diferente al resto,
solo eres un colorín.

La naturaleza nunca se pinta recta,
y aún así solo vemos su belleza perfecta.

3 eran 3…

Los hijos del Rey.

La Princesa Alma siempre era la que primera despertaba,
y con su risa a todo el mundo amenizaba.
El Príncepe Cuerpo, fuerte y valiente, a todas partes la llevaba,
era su corcel blanco y hasta para ella relinchaba.
Siempre abrazados,
siempre jugando.

Hasta que el mayor de los tres gritando los amenazaba:
– «cuidado que os vais a caer…!!», decía siempre el Príncipe Cerebro.

Era el mayor de los tres y los pequeños eran su responsabilidad. Pensaba él.
Nunca formaba parte de sus juegos, serio y correcto, a veces Cerebro hasta los castigaba.
«Es por su bien» pensaba.
Pero hasta en el cuarto más oscuro del castillo, Cuerpo y Alma jugaban.
Un día, que Cerebro se quedó dormido apoyado en el árbol más anciano del bosque mientras descansaban,
Cuerpo y Alma se lanzaron sobre él con toooodas sus ganas.
Cerebro muy enfadado, les ordenó que se comportaran.
Pero ellos no le dejaban.
Abrazados a Cerebro decidieron quedarse así hasta que admitiera que le gustaba.

Pasó media mañana, hasta que al fín, Cerebro agotado, no pudo más que ponerse a reir.
Sintió la pasión de sus hermanos en sí.

Cuerpo, Cerebro y Alma por siempre unidos no han dejado desde entonces de vivir.
Aprender, Volar y Sentir.

Y colorín colorado, este cuento tú me lo has contado…

La dama y la muerte

Mira a la muerte de frente,
ella viene esta noche de nuevo a por ti,
la llamas y gustosamente le das la mano.
Porque es lo que quieres sentir,
para amanecer mañana con palpitar renovado.

Es hora de morir,
sin que nadie, por favor, nos despierte,
no estés ausente.
Porque hay que vivir la muerte,
para avanzar más en el tramo siguiente.

http://212.227.136.88/press/

Sweet&dream!

Japi 2013: Life in love & love in life!

Just Love,
Just Peace,
Just Be,
a kissonyourlips

Just See,
Just Feel,
Just Leaf,
all the tricks

Very easy all of it.

Life in love&love in life.

Japi New Prism!

Love&life!

Propósitos?…sólo uno.

Listado de propósitos que te has puesto los últimos 20.000 años:
dejar de fumar,
ir al gimnasio,
empezar a comer sano?

Vamos a ponernos serios de una vez y comprometernos con un propósito de verdad:
Colocarnos las alas y dejar, por fín, que ese viajero llamado Alma aprenda a volar.
No hace falta que te compres una avionta, sólo recapacitar:

¿Cúando dejaste de soñar para hacerte viejo?
¿Cúando entraste en la rueda sin tu consentimiento?
¿Cúando la corriente te empezó a llevar haciéndote el muerto?

Vuelve a vivir la vida desde dentro.
Camina descalzo,
sal,
que la hierba sea tu colchón y el cielo tu manto.

Sonríe, saluda y abre de nuevo arriba los brazos.
Al vecino de enfrente, en tu pueblo, en tu ciudad, con todas la gentes.
Siente el fuego que te llena y esparce las llamas que dentro te arden.

Porque no eres un simple turista,
porque eres el viajero de tu propia vida.

Airún M.

Comapartimos, junto con La Piedra del Alquimsita ese video que sin quedarnos en lo «publicitario» nos hace cosquillitas ahí abajo:
http://lapiedradelalquimista.com/blog/veinte-anos/

Gocemos de este día con alas desplegadas!!

despliega&alas!

Des-Espera

Y allí estaba yo,
en la antigua cochera.
Me dijiste que al ponerse el sol para mi aparecerías.
Me apoye en la esquina más oscura tras aquel portón de madera,
y rogué, a Dios, que nadie nos viera.
Nerviosa como una adolescente por verte la cara,
por sentirme abrazada.

Me plantaste, de nuevo,
sola,
abandonada.
Caí desplomada al polvo del suelo.
Pensé, ilusa de mi, que esta vez vendrías.

Con los años me dí por vencida.

Mi pelo ya cano,
mi piel enjuta y seca,
allí, en aquella esquina, decidí perecieran.
Aquellos barrotes tan gruesos
en el suelo tirados quedaron.
Me fui,
salí,
dejando todo.

Y tras la puerta te ví,
allí estabas tú,
esperando a que saliera
y sin miedo, nos cogimos de la mano
para que la eternidad nos envolviera.

elqueespera&desespera!

Tu viaje: ve y vívelo!

«No, no hay ni un antes ni un después,
sólo está este preciso instante.
Has ido y has venido.
Tantas veces ya.
Siempre siendo lo mismo.
Has viajado con la excusa de ver, aprender, desconectar y conocer.
Vivir experiencias…
Y sí,
has visto, has aprendido y has conocido,
Monumentos, idiomas y gentes.
Y?
Todo te ha seguido,
sin hallarte.

No, no hay ni un antes ni un después.
Muchos años te ha costado ver,
que el único camino,
el único viaje que has querido emprender,
es el de querer mirarte, expresarte, experimentar tu propio Ser.
Donde no vas a ningún lugar.
Donde no mueves un solo dedo del pie.

Pero todo ello ha debido suceder para entender.
Para comenzar a pintar un nuevo lienzo en blanco.
Puedes correr lo fuerte que quieras, que allá donde vayas no hallarás eso que amarías ver.
Y seguirás sin comprender.

No, no hay ni un antes ni un después.
Quédate donde estés.
Que ahí comienza el viaje.

La aventura de ese infinito instante.
El instante de la vivencia de sentir y llegar al ser.»

Airún M.